con gratitud para nuestro equipo de vida comunitaria

Safe Harbor Voice  |  December 21, 2021
con gratitud para nuestro equipo de vida comunitaria

con gratitud para nuestro equipo de vida comunitaria

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Así como no hay un ‘yo’ en el ‘trabajo de equipo', no habría un ‘24/7’ en los servicios de Safe Harbor sin nuestro Equipo de Vida Comunitaria, quienes hacen que nuestros albergues operen las 24 horas, 7 días a la semana. Nuestro Equipo de Vida Comunitaria trabaja días, noches, y fines de semanas para realizar las necesidades y mantener la seguridad y bienestar de los residentes de nuestros albergues en Greenville, Anderson, y Oconee. 

A través de la pandemia, este equipo ha adaptado los albergues para que cumplan con los requisitos de seguridad del CDC para reducir los riesgos de salud y prevenir la propagación del COVID-19. Además, expandimos nuestro programa de albergue. Incluimos alojamiento en cuartos de hotel para ayudar a las sobrevivientes y sus familias mientras reducimos el cupo en nuestros albergues para guardar sana distancia. 

Nuestro Equipo de Vida Comunitaria realiza nuestra misión y visión a todas horas, proveyendo espacios informados por el trauma para las sobrevivientes y sus hijos para que salgan de un ciclo de violencia doméstica hacia un camino de sanación, esperanza, y vida nueva. Melissa Donald, una Especialista de Apoyo al Cliente en el albergue de Anderson dice que su parte favorita del trabajo es “saber que creamos un lugar seguro, un lugar recóndito que es tranquilo” para nuestros clientes. Para Christina Lewis, la Encargada del Albergue en Oconee, es saber que “a veces somos su único apoyo. Muchas veces (debido al aislamiento de una pareja abusiva), no tienen amigos o familia, entonces somos su sistema de apoyo en sus mejores y peores momentos.” Y Shannon Sloan, una Especialista de Apoyo al Cliente dice que “ver a los clientes felices y sonriendo es lo que me reconforta.” 

Como puedes imaginar, no todo es color de rosa en un albergue de violencia doméstica. Es un trabajo difícil y emocionalmente desgastante. Melissa comparte que se acuerda “estar despierta muchas noches hablando con clientes porque no pueden dormir. Están nerviosas, asustadas, llorando, y hago lo que puedo para consolarlas y escucharlas. Parece como si fuera la primera vez que en realidad pueden hablar con alguien sobre lo que ha pasado y decirle la verdad a alguien más.” 

Maya Dukes, otra Especialista de Apoyo al Cliente en Anderson dice que una de las partes más difíciles del trabajo es “hablar con alguien por teléfono y hacer un cuestionario de entrada y luego darme cuenta que no tenemos espacio o cupo y no podemos aceptarlas mientras vemos que su historia es difícil y ocupan nuestra ayuda!” Melissa agrega una frustración parecida, “Quisiera que tuviéramos más cupo y más recursos para compartir!”  

Vivir en un albergue es una situación difícil para cualquier persona. Se intensifica cuando están saliendo de una situación traumática. Varias de nuestro personal del equipo comparten que es difícil ver a una cliente entrar y no triunfar porque hacen cosas que ponen en riesgo su habilidad de quedarse en nuestros albergues. Elayna Prekker, una Especialista de Apoyo al Cliente en Greenville dice “es difícil cuando el trauma de alguien es negativo o dañino para la vida en albergue. Tenemos que considerar la seguridad de todes. Lo más difícil es tener que pedirle a alguien que se vaya porque no están en un momento en su sanación en el que puedan vivir seguros con otros.” Christina lo dijo bien: “Nuestros clientes vienen de diferentes familias, formaciones, religiones, y están en diferentes etapas de su sanación. Nuestro trabajo es crear un sitio seguro, tranquilo y armonioso en una casa.” ¡Más fácil decirlo que hacerlo! 

El trabajo de este equipo parece insuperable: ayudar a las sobrevivientes en medio de una crisis y trauma crónica y crear un hogar tranquilo, pero lo hacen con sonrisas y gracia. Literalmente son superhéroes. Kat Jackson, la Directora del Albergue en Greenville lo resume hermosamente:  

“No importa qué tipo de día estemos teniendo, siempre tenemos que considerar que somos las primeras caras que ven nuestros clientes. Tenemos que asegurarnos de tener un rostro sonriente y un corazón lleno de amor para ellas.” 

Mientras se juntan con sus seres queridos durante estas fiestas de fin de año, por favor tomen un momento para agradecerle a estos miembros valientes de nuestro equipo, quienes mantienen nuestras puertas abiertas los 365 días, todos los años!

I am a survivor of domestic violence.


“I didn’t know that I was being abused...

I am a survivor of domestic violence.


“I didn’t know that I was being abused because my definition of abuse looked different. My husband pushed me, but most of my suffering was verbal and psychological. I left my husband to protect our young daughter. Almost immediately I felt the weight of his oppression begin to lift. I could see a difference in my daughter as well. Then he broke into my home and assaulted me in-front of her.

I sought help and was led to Safe Harbor. My daughter and I are in counseling now. I am sorting out the mess that abuse has caused. I am finding my voice and seeking opportunities to grow and better my life as well as my daughter's. She will gauge her self-worth from my own self-worth. I must show her that she deserves the best, by expecting the best for myself.

Many years I suffered in silence. By telling my story and being honest with friends and family, I am taking control of my life again.”

- Beth

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